por Cindy Wooden
ROMA (CNS) — El papa Francisco pasó toda una tarde en la Villa Infantil SOS de Roma, el 14 de octubre, continuando sus visitas mensuales durante el Año de la Misericordia que realiza en beneficio de personas que se encuentran en circunstancias vulnerables.
En la villa, formada por cinco casas, se intenta brindarles a niños menores de 12 años, cuyos padres no pueden hacerse cargo, de una atmósfera semejante a un hogar.
En cada casa de la villa hay una persona que actúa como la madre de la casa donde hay un máximo de seis niños. La oficina de prensa del Vaticano, en un informe, dijo: “Los niños y niñas, acompañados por personal del centro, le enseñaron al papa el jardín de la villa, en el que hay un pequeño campo de fútbol y un patio de juegos. Así mismo, los niños le mostraron a su santidad sus dormitorios y sus juguetes. El papa escuchó las historias individuales de algunos niños y compartió una breve comida con ellos”.
Cuando el papa Francisco anunció el Año de la Misericordia, dijo que trataría cada mes, en privado, de cumplir una de las obras de misericordia. Desde el mes de diciembre del año pasado, el papa ha incluido en sus visitas a grupos de inmigrantes, ancianos, personas que se encuentran en recuperación de abuso de drogas y un refugio para mujeres que han sido rescatadas de la trata de personas y prostitución. En septiembre, el papa visitó una sección para niños recién nacidos de un hospital de Roma y, posteriormente, un hospicio, en donde pasó tiempo con personas que están cerca de la muerte y con sus familiares.