por Barb Fraze
WASHINGTON (CNS) — El secretario de Estado de los Estados Unidos, John Kerry, dijo que las atrocidades cometidas en contra de yezidis, cristianos y otros grupos minoritarios por integrantes del pseudoestado islámico eran genocidio, siendo esta declaración la primera después del último genocidio sudanés perpetrado en Darfur en 2004.
Kerry dijo que no era juez y parte, pero que el pseudoestado islamita se había autonombrado genocida debido a sus acciones en contra de yezidis, cristianos, shiitas musulmanes y otros grupos minoritarios.
Una coalición de 66 países, dijo Kerry, “trabaja intensamente para detener el avance de la autonombrada nación islamita de Irak y Siria o Levante (que en lengua árabe se lee: “Dawlat al-Islāmiyya fī al-Irāq wa s-Shām”), conocida por sus letras iniciales o acrónimo como “Daesh” o “Isis”. Y dijo que el mundo debe “marginar y vencer a los violentos extremistas, de una vez por todas”, para que el grupo no venga a ser reemplazado por otro con diferente nombre.
“Debemos reconocer a los que han perpetrado tales crímenes y pedirles cuentas”, dijo Kerry en una declaración del 17 de marzo, en la que se incluía una letanía de atrocidades como violaciones sexuales y asesinatos. Y dijo que con frecuencia se les daba a los cristianos a escoger entre convertirse al islam o perder la vida, opción entre dos clases de muerte.
Kerry dijo que las acciones militares para derrotar al pseudoestado islamita eran importantes, pero que también lo eran otras de especie diferente. Y dijo que las naciones coaligadas en contra de “Daesh” trabajaban para cerrarles el paso al acceso financiero del grupo y trabajar para que puedan algún día regresar a sus hogares las personas desplazadas.
Dos organizaciones y una comunidad religiosa con lazos en la región tuvieron una reacción rápida ante el anuncio.
El caballero supremo de Colón, Carl Anderson, director ejecutivo de los Caballeros de Colón, recibió con parabienes la declaración, diciendo que “es correcta y verdaderamente histórica”. Los Caballeros de Colón, junto con el grupo de En Defensa de Cristianos dieron a conocer un informe, el 10 de marzo, en el que se detallaban toda clase de crímenes, como violaciones sexuales, asesinatos, torturas, raptos y desplazamientos forzados que cientos de cristianos experimentaron y de los que fueron testigos.
“En voz unísona con los representantes de la Cámara, con el pueblo de los Estados Unidos y la comunidad internacional, los Estados Unidos le advierten a los que forman el grupo de “ISIS” que su intento de destruír a grupos de minorías religiosas debe terminar”, dijo en su declaración. “Los Estados Unidos y el mundo entero están unidos en esto y no disimularán volteando la cara hacia otro lado”.
Representantes del grupo de En Defensa de Cristianos dijeron que en su declaración Kerry “utilizó la palabra adecuada (genocidio, que es la extinción física o sistemática de un pueblo o grupo étnico o religioso) que conlleva la autoridad moral de levantar la conciencia internacional y que empuja a la acción a la comunidad internacional, formada por naciones responsables”.
Al reconocer que grupos minoritarios, religiosos y étnicos, han sido víctimas de genocidio, dijeron representantes de la organización, “los Estados Unidos han hecho gran justicia a favor de las víctimas de atrocidades cometidas por el grupo de ISIS, incluyendo más de 1,100 cristianos que han sido asesinados por su fe”.
Representantes del “Iraq Coordinating Committee of the North American Dominicans’ Justice and Peace Promoter’s” (Comité irakíe coordinador de los promotores de justicia y paz de los dominicos de Estados Unidos) también recibieron con beneplácito la declaración, diciendo que ésta “le daba peso moral ” al llamado que por muchos años ha hecho la organización para que se aumente la protección para los refugiados y la responsabilidad de los países del mundo para dirigir fondos y personal hacia programas de refugiados de irakíes que han sido internamente desplazados.
La orden religiosa de dominicos ha estado comprometida para que se haga justicia en Irak, ya por 20 años, después de que las Naciones Unidas impusieron sanciones económicas en contra del antiguo régimen a cuya cabeza estaba el ahora difunto dirigente irakíe Saddam Hussein; y ha enviado delegaciones para que trabajen hombro con hombro al lado de comunidades desplazadas y sufrientes.
El 14 de marzo, la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, con voto de ambos partidos, demócrata y republicano, de 393 a favor y 0 [cero] en contra, aprobó una resolución no vinculante en la que se condenan como genocidio las atrocidades cometidas por el pseudo estado islamita en contra de cristianos y otros grupos de minorías religiosas y étnicas en territorio ocupado de Siria e Irak, dándole a Kerry un plazo a vencerse el 17 de marzo para que se decidiera si se hacía una declaración formal sobre las atrocidades cometidas llamándolas, en su conjunto, genocidio.
El Parlamento Europeo ya había aprobado una resolución parecida el pasado mes de febrero.
El informe presentado por los Caballeros de Colón y por el grupo En Defensa de Cristianos tiene 278 páginas y se hizo en Washington. En él se contienen docenas de declaraciones recogidas entre el 22 de febrero al 3 de marzo, proporcionadas por testigos y víctimas de atrocidades llevadas a cabo por fuerzas del pseudo estado islamita. Y se presentan casos de tortura, violación sexual, secuestro, asesinato, conversión obligada, explosiones y la destrucción de propiedad religiosa y monumentos.